Tras la extracción de leche con el sacaleches o por el método manual, es importante almacenarla de una manera correcta.
Es muy importante lavarse las manos antes de manipular la leche materna.
El recipiente a usar debe ser el adecuado. Los mejores recipientes para el almacenamiento de la leche humana son los de plástico duro o cristal. Los botes para recogida de orina son adecuados sólo si no han sido esterilizados con óxido de etileno. En caso de ser así, se recomienda lavarlos muy bien con agua y jabón antes de su uso. Las bolsas de plástico no se recomiendan pues pueden presentar pérdidas, derrames, o contaminarse fácilmente. Sin embargo, las bolsas diseñadas específicamente para almacenamiento de la leche humana son aceptables para el almacenamiento a corto plazo (menos de 72 horas).
Cualquiera sea el recipiente a utilizar, deben ser lavados previamente con agua caliente y jabón; si están estériles, mejor.
TIEMPOS DE CONSERVACIÓN
Puede conservarse en la nevera la leche de hasta 4 días (temperatura nevera 4ºC). Debe colocarse en la parte más baja y posterior de la nevera, por ser la más fría. Nunca en la puerta. La leche materna puede conservarse en congelador con puerta independiente de la nevera, de 3 a 6 meses (temperatura congelador -15ºC). En congelador tipo arcón (-20ºC), de 6 a 12 meses.
LECHES DE DISTINTAS EXTRACCIONES. CANTIDAD DE LECHE A GUARDAR
Se puede juntar leche de varias extracciones en un sólo recipiente siempre que sean extracciones realizadas dentro de las 24 horas (por ejemplo, se extrae leche varias veces al día, se ponen las cantidades de leche de un día entero en un sólo recipiente, y se congela todo junto en un único bote que ahorra espacio).
Al momento de unir las leches de diferentes extracciones dentro del mismo día, se debe poner especial atención en la temperatura de todas ellas, que debe ser la misma.
Los botes a congelar debieran contener cantidades entre 30 y 90 ml para minimizar pérdidas, y conforme a las cantidades que el bebé toma habitualmente.
DESCONGELACIÓN DE LA LECHE
La leche materna va cambiando conforme el bebé crece, y se adapta a las necesidades de desarrollo de éste. Por ello es importante fechar la leche guardada y utilizar siempre la más antigua (debe utilizarse en primer lugar). El bebé puede tomar la leche a temperatura ambiente o calentada a la temperatura que tendría si la extrajera del pecho materno.
Lo ideal es descongelarla en la nevera desde el día anterior. Si esto no es posible o no ha dado tiempo suficiente, debe descongelarse a baño maría. NUNCA USAR EL HORNO MICROONDAS PARA DESCONGELAR O CALENTAR LA LECHE MATERNA. Esto elimina muchas de las propiedades beneficiosas de la leche y además existe un alto riesgo de calentarla demasiado.
La leche materna luego de un tiempo en un recipiente, separa la grasa del resto de componentes. Aunque su aspecto sea un poco extraño, ésta se encuentra en perfecto estado, sólo debemos proceder a agitarla suavemente para que se mezcle la grasa con el resto.
Una vez descongelada, la leche puede mantenerse en la nevera durante 24 horas, pasado este tiempo debe desecharse. Una vez descongelada, no se debe volver a congelar.
EL SACALECHES
Generalmente no es necesario esterilizar el sacaleches con cada uso. Se debe realizar un buen lavado con agua caliente y jabón. Se recomienda esterilizarlo periódicamente. Si nos encontramos frente a un caso de bebé enfermo o prematuro, la esterilización deberá ser más frecuente (1 vez al día o cada 2 días). En un bebé sano de 4-5 meses, la esterilización puede realizarse una vez por semana. En menores (sanos) puede ser cada 3 o 4 días.
Aunque la leche se mantiene bien en la nevera hasta 4 días, si sabemos que no la utilizaremos, lo mejor es proceder a su congelación para mantener mejor sus propiedades. Cuanto más se manipule la leche, más posibilidad de contaminación presenta.
La leche extraída puede suministrarse mediante jeringas, vasitos, cucharas o biberón. Los biberones son los mas prácticos y reducen la cantidad de leche a derramar, pero en bebés de pocas semanas puede causar confusión con el pezón y hacer que no se agarren bien al pecho (algo más probable cuanto más pequeño sea el bebé). La leche que ha entrado en contacto con la saliva del bebé debe tirarse y no guardarse para posteriores tomas.
EXTRACCIÓN MANUAL
Es muy importante mantener la higiene en todo momento. Lava el pecho y las manos. Ten preparado el recipiente. Sigue las instrucciones del vídeo. El ordeñe manual del pecho debe hacerse correctamente para no causar obstrucciones.
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